Por la mañana hemos estado
realizando unos talleres prácticos en las que mediantes movimientos y música
aprendíamos a conocer mejor nuestros cuerpos, a explorarlos internamente, a
expandir sus límites pues mucha veces no somos conscientes de que a pesar de
ser grandes, podemos hacer todo tipo de cosas, no hay que pensar que nuestro
cuerpo nos limita.
Ha transcurrido la mañana
rápidamente y ahora por la tarde nos llevan a una tienda de ropa, nueva no de
segunda mano como la de ayer, y en la que una mujer ha tallado un escultura en
madera y quiere mostrársela a todos
donándola a la tienda.
Wooow, la tienda está en la otra
punta de la ciudad, nos hemos trasladado Ana, yo , Gisela, Elisabeth , Petra y
otra chica alemana, tanto Elisabeth como Petra son dos mujeres muy agradables.
Al llegar a la tienda tras ¾ hora
, nos sorprende el enorme contraste que encontramos en la tienda, por un lado
un estilo en el local absolutamente desaliñado, si se puede adaptar ese
adjetivo a una tienda. Los suelos de madera viaja, ajada y en mal estado, las
prendas colgando de barras sostenidas por toscas cadenas, las paredes con fotos
de los dueños, las prendas aburruñadas ,
el aspecto un ciertamente lamentable
Vemos con gran sorpresa que la tienda utiliza una estancia enorme, pero
enorme, a modo de probador, allí al
parecer los clientes se desvisten y se prueban la ropa, estancia que
además tiene una puerta que conecta con la cocina de la casa , constantemente
abierta durante el tiempo que estuvimos , con personas saliendo y entrando como
si estuvieran en su caso, muy raro. Por
qué hacemos esta descripción, primero por que al parecer es la única tienda en
todo Berlín de ropa de talla grande con ropa moderna , juvenil y también
elegante, en el resto de la ciudad tienes que ir a grandes centros donde tienen
secciones de tallas grandes pero que no son tiendas de talla grande como tales,
así que si quieres ir a una tienda de ropa grande tienes que ir a esta tienda, cutre a más no poder, no
sabemos si era un tipo de estilo New Age o algo así, rompedor por cutre pero el
caso es que la gente , al parecer, acude allí,
y ¡¡¡ ojo al dato !!! las prendas tienen un precio medio de 150 EUR,
vestidos, bonitos pero del día a día, por encima de 200 EUR, camisetas 90 EUR,
en fin , un poco chocante para nosotros , máxime viendo la tienda de ayer, que
sí, que esta era toda ropa nueva pero presentada de la forma que os estamos
contando , ah y los dueños, amables, sí
pero super raros también , sus amigos vestidos al estilo Alaska, no sé si nos
entendéis , muy extraño todo y encima en una zona bastante pobre de la ciudad,
lo que también nos sorprendió , vamos que nos rompió los esquemas la tienda.
Baste el ejemplo de la bolsa que lucían fuera colgado de cualquier manera y con
el nombre de la tienda escrito también de cualquier forma , curioso , curioso.
A nuestra modo de ver es un poco
insultante que la única tienda de la
ciudad tenga ese aspecto desaliñado, en un barrio poco recomendable y con
precios astronómicos.
Por no ser tan negativo diremos
que la selección de la ropa era bonita y muy actual, y el cartel, bueno
pegatina más bien, que ponía las tallas que tenían , de la 42 a la 60 , venía
escrito así
De la 60 a la 42
Ese gesto nos gustó por que es
como si colocase a las mujeres super gorditas no en el extremo final , como
ocurre siempre, sino al principio lo que proyecta un mensaje menos agresivo que
si se pone de la 42 a la 60, parece una tontería pero nos gustó que fuera así.
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