Nuestro vuelo se retrasa una hora, no sabemos por qué pero llevamos desde las 8 y media de la mañana en el aeropuerto y son las 12:00 y nuestro avión no ha salido, esto es puntualidad alemana y lo demás son tonterías.
Tras 3 horas de vuelo llegamos a
Berlín , el viaje ha sido placentero por que pudimos elegir asiento y
conseguimos que una azafata muy atenta nos diera un extensor para que Ana pudiera
abrocharse el cinturón si problemas. Es un momento que algunas personas
gorditas suelen temer debido a que de alguna manera puedes llamar la atención a
los demás y ya se sabe que siempre puede haber algún estúpido que se mofe o
haga comentarios al respecto, provocando una desagradable situación que a nadie
desea. No decimos que pase pero si que hay un miedo a que pase. El caso es que
llegamos a Berlín sin mayores consecuencias.
Lo primero que nos choca es la
ola de calor que hay , 30 grados nos reciben como si en las islas Canarias
estuviésemos.
No tardamos en darnos sorprendernos
al ver que en la zona de espera a los pasajeros hay un chico enorme, de unos
200 kg o más esperando a sus clientes cartel en mano, simplemente en España no
es posible ver a una persona de ese tamaño.
Cogemos un taxi y en 15 min nos
plantamos en el hotel, precioso , muy limpio y tremendamente tranquilo.
No hemos comido nada , estamos
sudando y hambrientos como hienas y
hasta las 6 de la tarde no se come así que toca esperar.
Llegan las 6 después de ducharnos
, colocar la ropa y dejarlo todo más o menos apañadito. No vemos aún a nadie
del encuentro.
Son las 6 y nos presentamos
puntuales , hay una mujer bastante gordita ya en el comedor, nos presentamos ,
se trata efectivamente de la una de las participantes, de Dinamarca, una
activista de su país que nos cuenta que un poco cual es el motivo de querer
venir, empaparse de las iniciativas de otros países ya que en su país no hay
un movimiento organizado y quiere aprender de otros países.
A los pocos minutos van
apareciendo el resto de personas, en total 16 personas contándonos a nosotros
dos, asisten al evento .
Comemos filete empanado con puré
de patata , por fin calmamos nuestro voraz apetito. Comemos con el resto de personas, sólo estamos
los asistentes al evento en el comedor, curioso.
Nos vamos presentando, la semana promete ser interesante o eso
deseamos todos. Más tarde quedamos para tomar algo.
Hay un ambiente relajado. Se
habla básicamente en inglés, hay 5 personas que tienen ese idioma como lengua
materna, el resto nos vemos obligados a recordar el idioma de Sheaskpear
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